Expresión de sentimientos


Permitirles llorar y reír.
Los niños precisan expresar sus sentimientos de dolor llorando y gritando para poderlos superar del todo y así curarse de los efectos de las experiencias angustiosas.
El llanto es el proceso que permite sanar el trauma y los niños no se sentirán mejor hasta que puedan dar rienda suelta a sus lágrimas. Llantos y rabietas son las formas más eficaces que tienen los niños de hacer frente al estrés y mantenerse sanos. Los niños no lloran más de lo necesario, y deben sentirse amados y aceptados cuando lloran. Cuando necesitan llorar utilizan cualquier pretexto para hacerlo, que no debe ser ignorado.



A la mayoría de nosotros no nos dejaron llorar lo suficiente cuando fuimos pequeños. Nos distrajeron, riñeron, castigaron o ignoraron cuando intentábamos sanar nuestras propias heridas de infancia mediante el llanto. Nos ofrecieron juguetes o comida como
elementos de distracción y nos elogiaban cuando no llorábamos. Captamos el mensaje de que llorar es inaceptable.
Esto nos llevó a creer que una parte de nosotros no era buena y comenzamos a reprimir ciertos aspectos de nuestra personalidad para agradar a nuestros padres. Aprendimos a tragarnos las lágrimas, a negar nuestros sentimientos, a inhibir la esencia más profunda de nuestro ser.


Tenemos una fuerte tendencia a evitar que nuestros hijos lloren, como nuestros padres hicieron con nosotros.
Reír es tan importante como llorar y es un mecanismo de liberación de tensión que ayuda a los niños a liberar los sentimientos de miedo, rabia, vergüenza, inseguridad e incapacidad. Las personas suelen reír cuando se sienten asustadas, asombradas o incómodas. ALETHA J. SOLTER 


Si tu hijo llora no lo imites, eso confunde. Reflejar la emoción requiere siempre un grado de diferencia. Puedes buscar entonación emocional con la voz o con la expresión facial, pero nunca con todo el despliegue de la emoción (pena). Los niños necesitan sentirse reflejados pero no imitados.
@pallamares



Permitir y aceptar todos los sentimientos y emociones infantiles.
Resulta muy doloroso para un niño los gritos, menosprecios, las impertinencias, el hecho de ser avergonzados, juzgados, etiquetados, criticados, humillados y acusados.
Así como cuando se ven forzados a hacer algo en contra de su voluntad.
Los pequeños suelen ser desordenados, activos, impacientes, curiosos, miedosos y ruidosos. No pueden sentirse sinceramente amados si únicamente son tratados bien cuando son limpios, ordenados, pasivos y pacientes.
Cuando no se aceptan los sentimientos del pequeño, puede llegar a pensar que no son aceptados por lo que son. ALETHA J. SOLTER

No hay comentarios:

Publicar un comentario