Rabietas

Normalmente las rabietas salen cuando se encuentra con un limite, una acto o situación en el que no se puede hacer lo que se desea. Cuando no tenemos la libertad de actuar como deseamos nos es frustrante.

"...no son los niños, sino los padres quienes tienen que aprender a tolerar la frustración. Es decir, tenemos que comprender que ciertas cosas provocan frustración en nuestros hijos, y que esa frustración se manifestará con llantos, gritos, rabietas e incluso golpes e insultos. Hemos de ser capaces de tolerar esta manifestación de ira, que son respuestas normales a la frustración, sin negarles nuestro cariño, sin reñirles ni castigarles, sin caer en las absurdas venganzas"

.-Carlos Gonzalez-. Pediatra Catalán


Y aunque es duro no se puede consentir todo, pero tampoco hay que dejarles con su pataleta, siempre han de estar acompañados que vean que entendemos sus sentimientos pero mantenemos los limites con coherencia, creados desde el amor y el respeto.


LA IMPORTANCIA DEL AMOR.  Los niños necesitan sentir ese amor que les tenemos y nos podemos apoyar en esta frase "quiereme cuando menos lo merezca porque es cuando mas lo necesito".
Amar, no es conceder todo, ni es saltarse los limites impuestos o evitar ponerlos. Es abrazar y acompañar todo el tiempo que sea necesario.

"En determinadas circunstancias, un organismo más maduro puede ayunar durante un tiempo más o menos largo, o podría resistir un aire contaminado o unos cambios de temperatura fatales que conllevarían consecuencias fatídica para un niño pequeño. A primera vista es posible que la posición de preferencia del amor en este escalafón parezca exagerada. Pero los niños nos enseñan algo diferente. Cuando carecen de una atención adecuada, hasta puede suceder que de forma inconsciente pongan en juego otras necesidades de supervivencia: aguantan la respiración hasta que se ponen lívidos y acaban desmayándose, otros rechazan la alimentación o caen gravemente enfermos". (Rebeca Wild)

No hay comentarios:

Publicar un comentario